El Regalo Prometido: Compras de Regalos por Internet

Diciembre es sinónimo de muchas cosas en Venezuela. Hallacas, Nacimiento, Amigo Secreto y Niño Jesús, por mencionar las de toda la vida, y hasta elecciones, en los últimos años.

Lo que si es claro es que a finales de año la mayoría de los hogares venezolanos reciben mayores ingresos y, por ende, gastan más. Este gasto adicional se dirige a diversos rubros entre los cuales destacan los alimentos, licores, prendas de vestir y regalos, según un estudio de mercado realizado recientemente por Datanalisis (Principales Hábitos de Compra y la Distribución del Presupuesto Familiar durante la Temporada Navideña 2007).

Si bien este comportamiento ha sido típico durante muchos años, estas navidades presentan ciertas características que las hacen especiales.

En primer lugar, seguimos en una economía que crece y cuyos niveles de liquidez han aumentado considerablemente. En otras palabras, “hay real en la calle”.

En segundo lugar, el diferencial entre el tipo de cambio oficial (Bs. 2.150) y el llamado dólar permuta (superior a los Bs. 6.000) actúa como un subsidio muy atractivo para la importación de productos desde el exterior. Por poner un ejemplo, un Ipod Nano de 4GB tiene un costo de US $135 en la página amazon.com. Esto equivale a Bs. 290.000 a dólar oficial, o a Bs. 850.000 a dólar permuta. Nada más y nada menos que Bs. 560.000 de diferencia. En concreto, “mucha plata”. Esta cuenta por supuesto no incluye los costos de envío e impuestos, por lo que no debe ser comparada con los precios de ese producto en el mercado local. Muchos compradores terminan trayéndolo con algún amigo viajero o empleando los servicios de un P.O. Box.

Por último, y lo más importante a los ojos de los que analizamos los negocios en Internet es que la tecnología nos permite hoy día acceder a comprar productos en el exterior. Con sólo tener una tarjeta de crédito autorizada por Cadivi y un acceso a Internet, podemos entrar a un mundo de posibilidades de compra en línea. Estamos hablando de compras de productos nuevos o usados, subastas, etc. También estamos hablando de la posibilidad de buscar en pocos minutos multitud de opciones y precios para elegir la mejor opción.

Generalmente, los compradores en línea familiarizados con la herramienta y el proceso, modifican su patrón de compra durante las festividades de diciembre e incrementan la adquisición de juguetes y ropa, lo que no sucede en otros meses del año, en los que los preferidos son los accesorios de computadoras, entradas al cine y eventos, pasajes, CDs y DVDs y libros. En este año, el mencionado subsidio por diferencial cambiario hace más atractivas aun las compras vía Web y motiva incluso a muchos usuarios que no son compradores habituales ya sea porque desconocen sus ventajas o porque desconfían de este tipo de comercio.

Pero aparte de esa economía que podemos aprovechar los venezolanos en esta coyuntura, se encuentran otros beneficios de la compra por Internet. Y es que en la Web se pueden conseguir numerosas opciones de un mismo producto, por lo general a precios inferiores a los de las tiendas, lo que hace que aún pagando los gastos de transporte e impuestos de nacionalización la compra en línea sea atractiva. Incluso, objetos a un costo menor de 100 dólares no pagan impuestos de importación.

Otro factor que favorece la compra de regalos a través de Internet es la gran cantidad de venezolanos que actualmente vive en el exterior y que, apegados a sus tradiciones, invierten en obsequios vía electrónica y se los hacen llegar a sus familiares en Venezuela.

En mi caso personal debo decir que hace un par de años la influencia de la publicidad en los canales infantiles de la TV paga (la cual por cierto está más que probada como medio efectivo de convencer a los niños acerca de las bondades de un producto) me colocó en un aprieto, siendo que a mi hija le pareció que uno de estos juguetes publicitados era una buena opción para su carta al niño Jesús. El detalle: la publicidad era dirigida a otro país y el juguete no se encontraba en Venezuela.

Pues en ese momento me recordé de la película El Regalo Prometido, donde el padre del film, protagonizado por Arnold Schwarzenegger, inicia una batalla por conseguir el último muñeco Turboman.

La globalización trae sus problemas, pero también sus propias soluciones, así que se me ocurrió recurrir a Amazon.com, siendo que efectivamente, esta tienda en línea tenía el deseado juguete y allí terminó mi agonía.